DESCRIPCIÓN
La Reserva Ecológica Cotacachi - Cayapas, fue creada el 29 de agosto de 1968. Se encuentra localizada entre las provincias de Esmeraldas e Imbabura, con una extensión de 204.420 hectáreas y altitudes que ascienden desde uno hasta los 1.600 metros sobre el nivel del mar, en la zona baja, que registra una temperatura promedio de 25 grados centígrados; y de 1.600 a 4.939 metros en la zona alta, con una temperatura de 15 grados centígrados. El clima, determinado por la topografía, vana de templado periódicamente húmedo a frío de alto andino y de tropical lluvioso a templado periódicamente seco. Las precipitaciones anuales son de 3.000 a 5.000 milímetros.
El área de la Reserva esta dividida administrativamente en dos regiones, la zona que baja hacia la Costa ubicada en la provincia de Esmeraldas tiene la mayor extensión y la zona alta que se encuentra en la provincia de Imbabura. La primera se extiende desde los flancos andinos en dirección a la planicie costanera, encierra nos torrentosos que en su recorrido pierden fuerza y se abren paso por una vegetación selvática inaccesible.
En la zona adyacente a la Reserva existen dos grupos étnicos: los chachi y los negros. Según la historia y las leyendas, ninguno de los dos tiene más de 450 años en la región. Los negros fueron traídos por los españoles y los chachi migraron desde la Sierra por el arribo de los conquistadores a sus tierras. Hasta hoy, estos grupos viven en comunión entre ellos y con su ambiente, conservan muchas de sus tradiciones y creencias, que incluyen un modo de vida muy diferente al moderno. A esta presencia humana en la zona se suma la reciente llegada de colonos en busca de madera o minerales preciosos.
VOLCANISMO
Existen tres puntos sobresalientes del volcanismo existente en esta zona de la cordillera Occidental. El cerro Yanahurco, de edad pliocena, con 4.538 metros de altura sobre el nivel del mar, es un volcán apagado y fuertemente erosionado por la acción glaciar, representa el resto de un manto volcánico o del relleno de una antigua chimenea volcánica. El cerro Cotacachi de 4.939 metros de altura sobre el nivel del mar, esculpido y erosionado por la acción glaciar al fin del pleistoceno que lo ha dejado como una pirámide, peñascoso, bordeado por paredes casi verticales, presenta lavas de composición mineralogía variable que corresponden a los diferentes períodos de erupción en el proceso de estructuración del antiguo cono.
El volcán Cuicocha, yace en la ladera meridional del Cotacachi y es producto de una de sus erupciones, en su cráter, limitado por paredes interiores verticales, tiene una impresionante caldera de tres kilómetros de diámetro, la cual contiene una laguna de 200 metros de profundidad, sin desaguadero, con tres domos volcánicos que afloran en dos islotes y evidencian la renovación de la actividad volcánica, después de las erupciones explosivas finales que formaron la caldera.
HIDROGRAFÍA
La parte baja de la Reserva comprende una importante cuenca compuesta por el río Cayapas - Santiago y las subcuencas de los ríos Lachas, Rumiyacu, San Miguel y Bravo Grande, que se caracterizan por sus caudales que varían según la intensidad de las lluvias que se precipitan en los sectores montañosos. En Tachina, el río Santiago, según los expertos que han realizado mediciones, indican que crecido, el caudal se incrementa de 84 a 700 metros cúbicos por segundo. La cuenca del río Santiago-Cayapas cubre un área total de 7.100 kilómetros cuadrados con un caudal medio de agua disponible de 34.140 metros cúbicos por segundo.
El sector alto de la Reserva recibe menos precipitaciones y por lo accidentado del terreno y el predominio de alturas mayores a los 3.000 metros, los ríos no llegan a tener caudales mayores. Los principales son el Pinan, Pantaxi, Salado, Lita y Cristopamba, todos tributarios de ríos mayores que se forman fuera del área.
En la zona de páramo hay muchas lagunas de diferente tamaño como las de Donoso de Pinan con 2.500 metros de largo y otras que solo alcanzan unos pocos metros de diámetro. La proximidad de las numerosas lagunas a los centres poblados, ha propiciado que los recursos hídricos sean utilizados o considerados por su potencial, para abastecer la dotación de agua potable, para riego y generación de energía eléctrica.
Las altas precipitaciones, las montañas, los numerosos ríos, quebradas, lagunas y otras fuentes de agua representan condiciones muy favorables para el uso sostenido y controlado del recurso hídrico en beneficio del turismo y la población local y regional.
BIODIVERSIDAD
Las 10 zonas de vida existentes en la Reserva propician el desarrollo de una flora y fauna sumamente variadas, que constituyen la riqueza e importancia de su biodiversidad y la convierte en un relevante banco genético. La composición florística esta integrada por más de 2.000 especies de plantas, en tanto que en el reino animal se registran mas de 500 especies de aves.
Se ha determinado que las especies existentes son distintas a las encontradas en la Amazonía, debido a sus orígenes diferentes. Un buen ejemplo constituye el mono aullador de color negro que vive en los Andes y el rojo del Oriente. Las cuatro especies de monos que habitan en la región de bosques tropicales, al oeste de los Andes, viven en la Reserva.
FAUNA DE LA ZONA
La fauna de la zona la completan especies como el oso de anteojos, jaguar, tigrillo, guanta guatusa, tutamono y nutria. En la parte alta, debido al impacto de la presencia humana, se encuentran en numero reducido los venados y pumas; también se pueden observar cervicabras, lobo de páramo, sacha cuy y conejo de monte. Entre las aves, se destaca la presencia del cóndor, cuyas poblaciones han sido diezmadas en los últimos tiempos.
FLORA
El bosque tropical de esta región representa un ecosistema casi desaparecido en otras áreas de la costa noroccidental de América del Sur, Tiene afinidades florísticas con los bosques de Colombia, Panamá y Centroamérica. Es relevante la existencia de especies con gran valor comercial en la zona como el sande, cuángare, chanul, chalviande y peine de mono.
Algunos árboles de uso artesanal para la fabricación de canoas como el guadaripo, las palmas típicas en las elevaciones inferiores de la zona baja del área y especies como el pambil y el gualte, utilizados para pisos, paredes y soportes de las casas locales, son interesantes muestras de la flora que acoge la Reserva y que con la existente en el sector alto, se caracteriza por la presencia de cinco comunidades de plantas, que se diversifican según la altura, disponibilidad de agua, protección contra vientos e incendios y las posibilidades de acceso para la recolección de leña.
ATRACTIVOS TURÍSTICOS
Reserva Ecológica Cotacachi-Cayapas es el área protegida que recibe el mayor número de turistas a nivel continental. Desde 1995 el número de visitantes por año bordea las 100 personas, de las cuales los registros determinan que un 22% son turistas extranjeros y el 70% nacionales.
El Salto del Bravo es una pequeña playa enclavada en medio de una vegetación típica tropical, cerca de la confluencia de los ríos Agua Clara y Bravo Grande. Para llegar al sitio desde Borbón se debe hacer un recorrido en lancha de cuatro horas por el río Cayapas, hasta el poblado de San Miguel.
La cascada de San Miguel es una caída de agua de aproximadamente 100 metros pero de bajo caudal, escondida a ocho horas de caminata adentrándose en la Reserva desde el Charco Vicente.
El Salto del Santiago está cerca de la confluencia de los ríos Lachas y Santiago. Desde Borbón, en un trayecto de tres horas en lancha a motor, se puede subir por el río Santiago hasta la población de Playa de Oro y desde allí 45 minutos más de navegación.
El río Guaduero es el único acceso terrestre a la zona baja. Se inicia al sur de la Reserva, en la población de Rosa Zarate, más conocida como Quinindé, por un camino de segundo orden que, en tres horas, lleva hasta el poblado de Cristóbal Colon y desde allí se realiza una caminata que suele tomar casi una semana hasta llegar al limite de la Reserva.
En la zona alta esta la laguna de Cuicocha, el sitio más visitado de la Reserva al que se llega en 20 minutos, tomando un desvío de vía asfaltada que parte de la carretera Panamericana hasta la ciudad de Cotacachi. Un sendero autoguiado alrededor de la laguna permite observar flora y fauna alto andinas, allí funciona un centro de interpretación bien implementado. El Ministerio del Ambiente exonero del pago de ingreso a los visitantes que llegan a Cuicocha.
Otro atractivo es el volcán Cotacachi de 4.039 metros de altura; a su base se puede acceder en camioneta de doble tracción, desde un desvío en el camino que conduce a la laguna de Cuicocha. Es posible ascender por sus paredes utilizando, necesariamente, equipo de escalar.
La laguna Donoso de Piñán tiene aproximadamente dos kilómetros y medio de diámetro y esta acompañada de lagunas importantes como las de Cristococha y Yanococha, conocidas como lagunas de Piñán, de una singular belleza escénica apreciable únicamente en las lagunas parameras del Ecuador. Un sendero de interpretación recorre el sector explicando parte de la flora y fauna que allí se encuentra. La pesca de trucha esta permitida y es posible acampar y pernoctar en sus orillas. El ingreso a las lagunas de Pinan se realiza por la carretera Panamericana desde un punto que conduce a Urcuquí, ubicado un poco al norte de la ciudad de Ibarra, de allí se sigue hacia la comunidad de Piñán.
La cordillera de Toisán, un sector de bosque nublado importante por su composición florística y gran diversidad de fauna, especialmente de aves. El acceso permite apreciar los paisajes de bosques vírgenes, especialmente si se prefiere atravesaría y descender pos sus laderas occidentales hacia los ríos Las Piedras y Rumiyacu.
La cordillera de Lachas cubre el extreme norte de la Reserva, descendiendo hacia la Costa. Es una zona de bosque húmedo tropical de gran endemismo y diversidad. El acceso al lugar se lo hace partiendo de Lita, al norte de la Reserva, sobre la carretera Ibarra-San Lorenzo. Desde este punto, se inicia una caminata de aproximadamente seis horas para llegar al limite del área, sobre la cordillera secundaria de Lachas, donde es posible acampar. También se puede acceder saliendo de la población de El Placer, un poco más al noroeste, sobre la misma vía Ibarra-San Lorenzo. Una caminata de tres horas conduce al sector de río Negro, en esta misma cordillera. Si se prefiere, desde Ibarra es posible utilizar el ferrocarril para llegar a Lita o a El Placer.
En la zona baja se puede visitar el sendero Indio Bravo, que comunica a los poblados de Corriente Grande y Charco Vicente. El recorrido por la tupida vegetación selvática se lo completa en cinco horas, en cuyo trayecto se aprecian la flora y fauna características de la zona.
El sendero Mario Apolo se encuentra entre las poblaciones de Playa de Oro y Charco Vicente, fuera de los límites de la Reserva. El recorrido a pie dura unas 12 horas durante las cuales se cruza por ríos y quebradas muy pintorescos.